Superhéroes

El dorado

El regreso del Caballero Oscuro: El chico dorado • Frank Miller y Rafael Grampá • ECC Ediciones

Frank Miller avanza con paso firme en sus aventuras y desventuras dentro del universo que ha creado en torno a El regreso del Caballero Oscuro. En esta ocasión se permite hablar del legado de los héroes, poniendo el protagonismo en manos de los herederos de Batman, Superman y Wonder Woman, que tienen distintas visiones sobre la humanidad y diferentes maneras de ser héroes. Estos tres jóvenes tendrán que enfrentarse a un nuevo Joker, además de a la encarnación de la oscuridad. La puesta en página espectacular de Rafael Grampá, de estilo feísta (casi grotesco, en algunos casos) y potente, estalla con cada viñeta en explosiones de puro diseño, que recuerdan a la fuerza del trazo de Miller. De gran potencia, tanto en lo visual, como en el mensaje de fondo.

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Empatizando con los villanos

Escuadrón Suicida • Tom Taylor y Bruno Redondo • ECC Ediciones

Nueva saga donde se mantiene la obvia premisa de grupo de villanos del universo DC que, por diferentes circunstancias, deben salvar el mundo. El guion de Taylor introduce nuevos personajes, diseñados por Redondo, que, pese a formar parte del escuadrón, no son en ningún caso criminales, sino justicieros antisistema. Los motivos por los que estos personajes deben colaborar con el grupo están bien desarrollados y hacen avanzar la historia sin dejar de lado en ningún momento a los personajes de toda la vida. Apartado gráfico llamativo tanto en el dibujo como en el color, con especial atención a algunas soluciones narrativas fuera de lo convencional. Una buena vuelta de tuerca a los cómics de este estilo protagonizados por grupos numerosos.

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Psicointriga catalana

¡García! (vol. 3) • Santiago García y Luis Bustos • Astiberri Ediciones

Regreso de las aventuras del agente secreto al servicio del régimen, descongelado en los tiempos presentes. La premisa presentada por Santiago García y Luis Bustos era suficientemente jugosa como para darle continuidad al personaje, subiendo las apuestas. Acompañado de Antonia, la inquisitiva periodista, se traslada la acción a Barcelona en una intriga en la que el trasfondo político e histórico juega un peso. Además de las consabidas raciones de tortas y persecuciones, se plantean temas acerca de las apropiaciones de identidades nacionalistas por parte de intereses políticos, de la hipocresía de los agentes que los representan y de la necesidad de seguir haciendo justicia para con la memoria histórica. Además, Bustos se emplea a fondo, permitiéndose bellas filigranas visuales y abundantes homenajes a la ciudad condal.

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La continuidad peleada a veinte uñas

La increíble Masacre-Gwen contraataca • Leah Williams y David Baldeón • Panini Cómics

Gwen Poole es probablemente uno de los personajes más originales acuñados por La Casa de las Ideas en este nuevo siglo: ruptura de la cuarta pared, homenaje al fandom, juegos metanarrativos y humor descacharrante. Desafortunadamente su continuidad acostumbra a pender de un hilo, y la guionista Leah Williams intentó darle un hálito de vida jugando precisamente con la conciencia del personaje de que debía «liarla bien gorda» para asegurarse su pervivencia como personaje en el universo Marvel. El resultado es una historia tan rica en risas como en precisos detalles autorreferenciales y en feels. Al flanco, el dibujante David Baldeón responde a este reto de altura con uno de sus mejores trabajos hasta la fecha.

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Jugando con el canon

La gran novela de los Cuatro Fantásticos • Tom Scioli • Panini Cómics

En la línea del trabajo de síntesis que hizo Ed Piskor con la Patrulla X, Tom Scioli se embarcó en la crónica de las aventuras de la primera familia de Marvel. Sin embargo, Scioli ha ido más allá del mero resumen. Con un concepto de toybox, ha sacado a los personajes y las historias clásicas del grupo y las ha ido recreando y añadiendo variaciones hasta que dichas variaciones han tomado el control de lo relatado. Igualmente, el cómic practica un cierta sátira infusa que gusta mostrar a los personajes abundando en lo bizarro y en lo vulnerable, aspectos que Lee y Kirby emplearon con afán en el cómic de superhéroes. Del segundo, Scioli expande su clásica composición de 2 × 2 al 5 × 5, convirtiendo la explosiva narrativa visual de Kirby en un álbum de cromos/fotos.

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Chica revolucionaria en tu puta cara

Magical Girl Holy Shit • Souryuu • Arechi Manga

Magical Girl Holy Shit no es una nueva vuelta de tuerca al género de las magical girls, es un martillazo. La protagonista de esta historia no sería precisamente un ejemplo de corazón puro y virtud, casi que estaría más cerca de una delincuente juvenil, pero le han caído esos poderes del cielo (con mascota incluida) y ahora se dedica a destripar a los malos con un estilo que nos puede recordar al de One-Punch Man. Este manga es muy loco, muy bruto, con un dibujo realmente espectacular, y que, sin ser nada pretencioso, se convierte en una de las propuestas más originales y divertidas del género, quizá desde Puella Magi Madoka Magica.

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¡Mamá, quiero ser un superhéroe!

My Hero Academia • Kōhei Horikoshi • Planeta Cómic

Sigue con buena salud este manga que nos lleva a un mundo en el que prácticamente todo ser humano tiene superpoderes y existe una famosa academia que forma a los superhéroes que defenderán a la sociedad de aquellos que los utilizan para hacer el mal. Sin salirse demasiado de la tradición de los shōnen de acción de la revista, Horikoshi sigue ofreciendo uno de los mangas juveniles más frescos del momento y con un dibujo espectacular, de fuegos artificiales. Ha conseguido conectar con el público joven, pero al mismo tiempo tiene cierto atractivo para los aficionados a los superhéroes estadounidenses de toda la vida. El autor es fan confeso de Spiderman, y el manga está lleno de pequeños guiños al cómic norteamericano.

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Dejando a los superhéroes sentir el paso del tiempo

Spiderman: Toda una vida • Chip Zdarsky y Mark Bagley • Panini Cómics

Es fácil imaginar la dificultad de hacer una historia de un personaje del que se llevan escribiendo aventuras desde los sesenta, y lograr que esta destaque por su calidad, enfoque y/o trascendencia, pero esa es la tarea en la que se embarcan Chip Zdarsky y Mark Bagley. El planteamiento es tan sencillo como brillante: aceptamos que, aunque pasen las décadas y las aventuras, los personajes de cómic se quedan más o menos congelados en la edad y el aspecto en el que los hemos conocido. Pero ¿y si envejecieran como si el tiempo les tratase como corresponde? Esa es la tesitura en la que embarcan a Spiderman, con seis entregas (una por década), editadas en España en un único volumen imprescindible para incondicionales y perfecto para el lector casual.